Por Antonio José Vicente
Voluntario, Monitor del Taller de Dibujo y Expresión Artística
Fundación SoyComotu
Carta a un amigo, seas quien seas.
Querido y estimado amigo, antes de nada, permite que me dirija a ti con familiaridad y que comparta contigo algunas reflexiones, o quizás desvaríos, sobre el tema del arte, mientras preparo las sesiones para el taller de dibujo, creatividad y expresión artística.
Como Monitor del taller, podría comenzar a hablar sobre el arte como un principio transformador del espíritu humano, de cómo conmueve al espectador y libera al creador que cada persona lleva dentro. Pero antes de llegar a eso, me gustaría formularte esta cuestión: ¿te has preguntado alguna vez que es el arte?

Esta pregunta es la que les hice a los participantes durante la primera sesión de taller. Y, por supuesto, es una pregunta muy difícil de responder, no porque su definición sea abrumadoramente larga, sino porque, como he mencionado al principio es un agente transformador del espíritu humano, y todo lo referente a la humanidad es complicado.
Antes del llamado “arte moderno”, la belleza y la perfección eran los objetivos principales que buscaba el artista, ya que su vida dependía, casi literalmente, de su destreza para plasmar lo que veía o lo que quería reflejar en su obra.
El artista, aún estaba limitado, incompleto, aún tenia unas cadenas que lo frenaban, que no dejaban fluir todo su potencial. Su capacidad de Expresión estaba contenida. Sin embargo, en los últimos dos siglos, las cadenas que ataban al artista se comenzaron a aflojar, dando paso a una era de milagros como no se había visto nunca en la historia de la humanidad que lo cambiaron todo, también al ser humano y con ello al artista. Aquí es donde comenzó nuestro viaje en el taller, un viaje para poder ser conscientes del poder de la expresión artística, el poder que ejerce en nosotros, cómo nos alimenta el espíritu y cómo afecta al mundo que nos rodea.
Antes de comenzar el taller una pregunta azotaba mi mente, en realidad, más que una pregunta era como una tormenta itinerante que iba y venia a mi mente de vez en cuando y que empezó hace años, cuando un ángel con despacho me dio un empujón hacia el mundo del arte.

¿Cómo se puede mejorar la capacidad de Expresión artística?
Después de una extensa búsqueda, viendo muchísimos, blogs, videoblogs, tutoriales, documentales y libros de arte, una cosa me quedó clara. No hay una manera fácil ni directa para poder mejorar nuestra expresión artística, eso es algo que me quedó muy claro. En todos estos distintos documentos, la información se presentaba de manera abstracta, difícil de comprender y más difícil de llevar a cabo. Pero entendí lo que tenían en común. Entendí que una manera sabia de comenzar, es conocer a los artistas que nos precedieron, conocer su obra y su vida, ya que conocer la una sin la otra, sería como ver una película sin escuchar el sonido o viceversa. Esos conocimientos nos deberían inspirar y alentar para el siguiente paso lógico.
Lo siguiente seria pintar o fotografiar, quizás grabar o dibujar, en el fondo es lo mismo, en el fondo es crear, intentando dejar a un lado la mente racional y dejarse llevar por lo que se quiere plasmar. Dando rienda suelta a la creatividad y trabajando en nuestras obras como bestias incansables del arte, intentando poner en lo que creas todo lo que le es imposible al ser humano decir con palabras.
Pero aún así, quizás nunca sientas que has hecho suficiente, que no has puesto suficiente en lo que estas creando, que podías dar más, que te podías expresar mejor. Las búsquedas importantes no son fáciles y quizás nunca llegues a poder llevar tu expresión artística a su máximo potencial o incluso quizás sea imposible de alcanzar. Mas esto no es motivo para entristecerse, querido amigo. Porque la respuesta de mi búsqueda, es tan sencilla como suelen ser las cosas mas importantes de la vida, esas cosas tan sencillas que a diario pasamos por alto y que debemos estar constantemente recordándonoslo a nosotros mismos. La búsqueda de la respuesta, es en sí la respuesta, es el camino cuesta arriba, es el hambre insaciable del artista. Es el impulso de crear, de liberar nuestra creatividad de las cadenas de la vida gris, lo que hace al artista. Es artista por crear, por experimentar y por expresarse.
Y el artista es el que crea el arte.
Pero eso no es todo, ya que si te diviertes haciéndolo y ademas lo puedes hacer con gente que tiene tantas ganas como tu de expresar lo que es imposible expresar con palabras, esa búsqueda te puede llevar a la felicidad, o lo más cercano a la felicidad que se puede estar. Porque después de todo amigo, nunca dijo nadie que debías buscar solo, o que no pueda ser divertido. Esto es lo que encontré en mi búsqueda al tratar de mejorar la expresión artística, una búsqueda que empezó hace muchos años y que no acabará, mientras pueda seguir creando y expresándome.
Y como despedida solo te diré, querido amigo, seas quien seas y hagas lo que hagas, seas fontanero, maestro, albañil o funcionario, mientras que en lo que hagas nunca dejes de crear, buscar, y pongas una parte de ti en ello, para mi seras artista.
Un fuerte Abrazo, amigo mio.
Atenta y cordialmente,
Antonio José Vicente